Adoro esta foto, me la sacaron en un gran momento conmigo misma y toda esa maravillosa naturaleza que me rodeaba, sinitiendóme pura SEMILLA brotando.
Reconozco que no es fácil ser soberana de nuestra propia vida, en esta sociedad todo nos empuja hacia afuera y terminamos creyendo que algo tiene que pasar afuera para que nuestra vida se convierta en la vida que queremos vivr.
Nos pasamos los años buscando algo que nos de respuestas y nos solucione la vida, y así siempre nos falta algo.
Aún nos queda aquel curso por hacer, porque aún nos queda no se que cosa por aprender, o aquel trabajo mejor, o aquella casa, coche, vestido, bolso… o pareja… lo que sea que nos hará feliz viene de afuera.
Nos pasamos la vida regando semillas ajenas.
Y un día en que “recuerdas” que por ahí no es y a esta altura te echas tanto de menos y sientes que te desconectaste tanto de ti que ya no sabes que es lo que te gusta ni como te gusta, porque cuando tenías que preguntartelo también lo preguntabas afuera.
Y de repente sos consciente de la desproporción que hay entre lo que das y lo que te das y que por alguna razón siempre te dejas para el último lugar… todo antes que ti y tus necesidades… Te suena?
A mi me pasó (me volvío a pasar) no hace mucho.
Por eso me gusta volver a esos momentos como el de la foto, en donde las dudas se disuelven y recuerdas la importancia de cuidar y nutrir la SEMILLA que eres, recordar tu belleza y agradecer la vida que te habita y la libertad de elegir cual es la vida que brota de ti…
Libertad es la palabra de lo que se siente y sucede en un pequeño clic, en un instante en donde al recordarlo crece dentro tuyo la confianza de que tu eres la protagonista de esta vida y la “responsable” de cuidarte, nutrirte, darte espacios y momentos para tus necesidades.
Tu, la Protagonista de tu vida, no el personaje secundario.
Es curioso porque cuando llega este momento, todo se pone en orden y puedes ver claramente lo que haces, cómo lo haces y también eres consciente de cómo poder cambiarlo, y más curioso aún sentir como esta activo ese espejo universal que te refleja en los otros.
Sucede la magia, todo es, tu eres.
El encuentro con una misma, un gran momento para parar, observar y darnos cuenta que es nuestra semilla la que necesita ser regada y fertilizada para que brote bien profundo esa que eres, que siempre fuistes y que te espera paciente, con una sonrisa a que vayas a rescatarla.
Brota semilla, brota!! Ahora es el momento!
Comentarios
Publicar un comentario